"Membresía Forevista": El cuento de Cecilia Solá que emocionó a todos en el estadio
En el marco del mes de la mujer, Chaco For Ever invitó a la docente, y escritora, Cecilia Solá quien interpretó dos cuentos propios en el entretiempo del partido que el albinegro disputó ante Güemes en el Gigante de la Avenida. Además, Amelia Fernández volvió a ser la voz del estadio.
Para el hincha de Chaco For Ever cada partido de local es especial. Único, distinto e histórico. En este ambiente y con motivos por el mes de la mujer, durante el entretiempo del encuentro que el albinegro jugó ante Güemes, la docente y escritora Cecilia Solá leyó ante las 20 mil almas presentes dos cuentos de su autoría mientras que la periodista Amelia Fernández regresó a la voz del estadio en el Juan Alberto García.
Cecilia Solá es docente y escritora, activista en "Ni Una Menos" Resistencia. Nació en Entre Ríos pero desarrolló su carrera en Resistencia Chaco. Docente de nivel secundario, lleva tres libros publicados que ponen de manifiesto su compromiso con los Derechos Humanos, la lucha contra las violencias hacia la mujer y la visión social de la educación: Diario de un Lobizón, Cartas para la Manada y Contracuentos, las historias que no nos contaron.
Entre los dos cuentos que interpretó, el primero emocionó a todos los hinchas ya que la trama envuelve a un joven hincha de For Ever, y alumno de Solá, aquel 5 de diciembre donde Chaco se vistió de blanco y negro tras la consagración en Santiago del Estero.
El cuento completo
Membresía Forevista
Yo no soy futbolera. No se trata de que lo critique o no me guste, es que criada entre mujeres fuertes y varones ausentes, el fútbol nunca fue parte de mi cultura.
Ayer Chaco For Ever le ganó a Gimnasia y Tiro de Salta y ascendió a la Primera Nacional.
Yo estaba en la plaza. Estábamos con las pibas leyendo cuentos a la gorra, para juntar juguetes para la gurisada cuando empezamos a escuchar los bocinazos.
- Nos vamos a tener que ir, Ceci, porque terminó el partido y la calle va a ser un loquero- me dice Adri.
Ara ya estaba juntando lo poquito que conseguimos y yo vaciaba el mate cuando los vi. Eran siete u ocho pibes, abrazados, saltando, alegres e indiferentes a algunas miradas de desaprobación de las señoras que tomaban un helado en la " tradicional confitería resistenciana"
En eso nos vemos: es el Santi, mi alumno, el que casi no va a clases y cuando va se duerme. El que casi no habla, y menos se ríe.
El que me dijo " todo bien con vos profe, pero el inglés no es para mí, para que quiero yo Inglés "
El Santi viene en cueros y revoloteando una remera blanquinegra que ha conocido tiempos mejores, gritando y saltando, así, con las patas flacas en el aire, como si rebotara. O si volara.
- Foreeeever, Foreeeever! - me grita
- Forever what?- le contesto, profe pesada que de todo quiere hacer una excusa pedagógica.
- Forever champion ticher!- me grita con una carcajada que, les juro, era más linda que todos los helados de chocolate, que todos los diez en la libreta, que todas las flores de la plaza.
Hace tiempo un amigo me preguntó " y vos de que cuadro sos " y como le dije que de ninguno, me declaró forevista.
Ayer la carcajada hermosa de un pibe triste me confirmó la membresía Forevista..... For Ever.