En el marco de las nuevas restricciones por la pandemia de coronavirus, el gobierno provincial dispuso que hasta el próximo domingo 30 los bares y restaurantes sólo pueden funcionar hasta las 21, y bajo la modalidad delivey o take away, sin la permanencia de clientes en el local. Después de esa fecha temen “una nueva prórroga de restricciones”.

Ante la inminente quiebra y cierre de muchos bares y confiterías, sus dueños y empleados manifestaron su profundo rechazo y malestar colocando banderas argentinas y globos negros en las veredas de sus comercios.

Las nuevas restricciones de Jorge Capitanich mataron a estos comercios”, dicen de Mirasoles, San José, Baco, Alfonso, La Biela, típicos lugares de la ciudad.

"Ya no damos más, con estas medidas nos mataron económicamente" fue la tajante definición del dueño de un bar céntrico de Resistencia.

"Están destruyendo la economía, están destruyendo empleos, nos están dejando en la calle, esto es un desastre", expresaba un empleado.

Desde Mirasoles fueron más expresivos: “Así estamos otra vez … una vez más nos obligan a cerrar las puertas y no poder recibirlos ... hemos aguantado un 2020 a pesar de todo, mantuvimos todos los puestos de trabajo, sobrevivimos … trabajamos respetando todas las medidas de seguridad y los protocolos establecidos”.

“Pero hoy una vez más debemos cerrar las puertas. Solo podemos atender modalidad delivery y retiro del local. No sabemos por cuánto tiempo … ni tenemos respuestas para las personas que dependen de nosotros a quienes agradecemos muchísimo por acompañarnos ... No vamos a bajar los brazos solo queremos trabajar genuina y honestamente. Argentina te queremos de pie”, agrega no obstante.