Lo que Coqui no puede tapar: de Taco Pozo buscan a un niño fallecido sin ataúd y policías con Covid durmiendo en el piso
Los dos casos se dieron esta semana. Primero, en Taco Pozo, el último rincón de la provincia, el chofer de la ambulancia contó las penurias que vivió desde el martes 23 a las 15 cuando partió hacia la capital chaqueña para buscar el cuerpo de un bebé. Cuando llegó se encontró que lo tenía que traer sin ataúd porque no había. Con sensatez, la que el sistema público y gubernamental no tiene, pagó con su tarjeta personal el cajón para el niño para poder llevarlo de vuelta a Taco Pozo. Pero, se quedó sin dinero para pasar la noche en algún lugar y comprar comida
Franco es ambulanciero, salió desde Taco Pozo el martes 23 a la siesta y el periplo que le asignaron le llevó 24 horas en Resistencia sin encontrar soluciones para la tarea asignada. Pasó la noche en una estación de servicio sin dinero para alojarse en algún lugar y comprar comida, es que gastó todo el margen de su tarjeta de crédito en comprar un ataúd para llevar el cuerpo encomendado.
¿Saben quiénes son?
— Fabricio Glibota (@fabriglibo) June 26, 2020
Los policías de la comisaría del El Sauzalito, #CHACO, la misma donde prestaba servicios Pogonza (QEPD). Todos, si, TODOS, dieron positivo #coronavirus y se encuentran aislados pic.twitter.com/vfufCHB3Ce
El ambulanciero relató que desde el municipio de Taco Pozo como desde el Hospital local le dijeron que "ya estaba todo listo" para el retiro del cuerpo del niño de 1 año y 4 meses que estaba en la morgue judicial, pero al llegar al lugar se encontró con que no estaban hechos los trámites pertinentes ni tenía en que llevar el pequeño cuerpo, contó en declaraciones a La Radio. Esta pasa en el gobierno de Jorge Capitanich.
Abandonados, en el piso y sin comida
Por otro lado, los nueve compañeros de trabajo de René Pogonza, el primer policía que falleció de Covid-19 en el país, quedar “tirados” a su suerte. Duermen en el suelo y no tenían para comer hasta que la sociedad chaqueña comenzó a reclamar y recién ahí el Estado conducido por Jorge Capitanich se le escapan las cosas.
Se tuvo que hacer público para que los alimentos le lleguen. Les llegó un poco de comida. La planificación, la táctica, la empatía y la coordinación entres las ministras Paola Benítez (Salud), Gloria Zalazar (Seguridad) y Pia Cavana (Desarrollo Social) dejan que desear.
“Para conocimiento del señor jefe de Policía, funcionarios. Quiero pensar que no están enterados en qué condiciones están aislados 9 efectivos policiales en comisaria de El Sauzalito. Sí, los 9 nueve se arreglan para descansar sin medicación, sin insumos de higiene, sin alimentos en una sola habitación. Tirados en el piso 2 colchones que les acercaron vecinos y familias para 9 efectivos policiales que dicho sea de paso creo que son personas, humanos. Señor jefe de Policía, funcionarios a quien corresponda por favor no los dejen tirados así como están abandonados por su institución y su Gobierno. Sin comida tirados 9 en dos colchones usando chaleco balístico de almohada, lo único que se les cruza por la cabeza es volver al trabajo y seguir sirviendo a la comunidad. Destaco señores jefes, funcionarios, gobernador que el primer hisopado les realizaron mal. En el día de hoy recién le realizaron de vuelta y están ahí tirados, abandonados porque en ningún lado los quieren alojar. Actúe por su personal. Señor jefe de Policía y gobernador recuerde que usted es el primer policía de la provincia”, dice la denuncia en Facebook que tuvo después llegada al Gobierno.
Antes, no hicieron nada, sino después de la denuncia pública. La provisión de elementos en general a los nueve policías aislados en la propia comisaría del El Sauzalito por Civid-19 positivo, llegó ayer a la noche.
Las camas no se informó si también le proveyeron. Todo extraoficial, porque desde Prensa del Gobierno de Capitanich de estas cosas no se hablan.
