Pero para los diferentes cultivos existen requerimientos particulares para lograr un óptimo desarrollo y productividad. Así, los esquemas de riego estáticos tradicionales no se ajustan adecuadamente a las necesidades hídricas de los cultivos en producción o de los ensayos en el ámbito de investigación.

Ante ello, el Grupo de Investigación en Innovación de Software y Sistemas Computacionales (GIISSC), de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE, en conjunto con investigadores en forrajes de la Estación Experimental INTA “El Sombrero” pusieron en marcha un proyecto en busca de lograr un sistema de riego que aporte el desarrollo de cultivos en invernáculos.

Para la construcción del prototipo se trabajó con un equipo interdisciplinario, con expertos en las áreas de sistemas de información, electrónica y con una experta en el área de aplicación.

Así surgió el “Planificador Embebido para la Gestión de Riego Automático aplicado a invernáculos” un sistema eficiente para el control de las variables ambientales en el desarrollo de cultivos en los laboratorios e invernáculos, según explica el doctor Emanuel Irrazábal, director del grupo GIISSC de FACENA-UNNE.

El proyecto contó además con la participación de José Manuel Alonso, Hugo Ferrari e Iván Sambrana, integrantes del grupo de investigación de la UNNE, en tanto por el INTA El Sombrero las actividades estuvieron coordinadas por la doctora Silvana Ferrari de la sección de Forrajes y Pasturas del Área de Ganadería Subtropical.

El sistema

El prototipo desarrollado cuenta con características adecuadas en cuanto al desarrollo del software, el uso adecuado de los sensores y actuadores, y la configuración adecuada de una interfaz útil.

La solución tuvo en cuenta el riego manual y automático; y una arquitectura software-hardware ampliable.

Entre las cualidades del desarrollo, el sistema riega por tiempo de forma periódica y mantiene automáticamente la humedad del suelo dentro de un rango definido. Además, se configura de forma remota y se sincroniza con un servidor web para obtener las configuraciones de riego y enviar datos del ambiente y registro de actividad del sistema.

El sistema gestiona diferentes parcelas de un invernáculo, guarda los datos en una tarjeta SD para que no se pierda información si la conexión falla y permite el acceso al servicio web sólo a usuarios registrados. El usuario visualiza un gráfico de los cambios en las variables climatológicas del sector entre dos intervalos de tiempo en un rango de horas y días.

“El Planificador Embebido para la Gestión de Riego Automático (PEGRA) tuvo en cuenta dos tipos de riego: manual y automático; y una arquitectura capaz de ser ampliada a mayor cantidad parcelas controladas”, según resaltó el doctor Irrazábal.

Agregó que el uso de una metodología iterativa e incremental mejoró la comunicación con el usuario final logrando una solución más acorde a sus necesidades.

El prototipo se utilizó en el marco de los proyectos “Generación y evaluación de poblaciones de híbridos de Setaria sphacelata y Acrecerás macrum, dos especies forrajeras para el nordeste argentino” y “Desarrollo de cultivares superiores de especies forrajeras para sistemas ganaderos y agrícola-ganaderos de la Argentina” en los que participa la Dra. Silvana Ferrari del INTA, haciendo un uso intensivo de invernáculos para el desarrollo de sus experimentos.

Relevancia

Irrazábal destacó que la eficiencia en la aplicación y la productividad del agua de riego son temas prioritarios, teniendo en cuenta que la agricultura bajo riego es la mayor demandante, en la competencia con los otros usos (urbanos, recreativos, industriales y energéticos), utilizando aproximadamente el 70% agua dulce que se consume en todas las actividades.

En esa línea, desde hace varios años se han implementado sistemas de riego que permiten un uso más racional del agua, por lo cual se trata de un campo de alta demanda de innovaciones.