El viernes 17 de Junio Ariel Retamozo atropelló con su ciclomotor a un burro que cruzó la calle José Ingenieros frente al barrio Cooperación, luego del accidente perdió el conocimiento, fue trasladado al Hospital 4 de Junio de Sáenz Peña. Se sometió a una operación de cuatro horas para reparar los daños en su cráneo.

El sábado 18 el joven sufrió un paro cardíaco por lo que fue reanimado por shock eléctrico. El lunes recuperó el conocimiento y en la jornada del sábado 25 de Junio recibió el alta médico. Ariel Retamozo salvó milagrosamente su vida según el testimonio de los profesionales médicos, aunque deberá tener especial cuidado, ya que en su cráneo presenta un orificio de 5 cm de diámetro que quedó, luego de la cirugía, cubierto solamente por el cuero cabelludo.

Pese al grave suceso no hubo reacción por parte de las autoridades encargadas del control de animales sueltos, y los mismos burros que provocaron el accidente siguen pastando a pocos metros del lugar en el que Retamozo salvó su vida de milagro. Debido a la gravedad de la lesión en su cráneo, el hombre deberá realizar un tratamiento durante dos años a su propio coste. Además los médicos determinaron que no podrá dsarrollar las tareas que realizaba debido a la gravedad de la lesión.

Irónicamente, el burro que atropelló este joven fue trasladado en carácter de “detenido” al predio de la Policía Rural luego del accidente, y pese a no poseer marcas ni señales, pocas horas después habría sido retirado por una persona que dijo ser su propietaria. Cabe recordar que oportunamente la familia de Retamozo ya había tenido un mal trago adicional, cuando después del accidente determinó el faltante de $ 1000 de la billetera del joven herido.