Un año para el olvido que el Chaco seguramente querrá dejar en el pasado
Este año que finaliza realmente ha sido muy difícil para la provincia, que estuvo repleto de escándalos, disputas mediáticas, resultados electorales inesperados y una agravada crisis financiera que no se había vivido en muchos años.
Durante los ocho años de gestión de Jorge Capitanich el Chaco se había acostumbrado a una fluidez financiera que permitía pasar sin sobresaltos los vaivenes cotidianos de la economía nacional. La buena relación con la Casa Rosada y la avalancha de obras públicas que se llevaban adelante facilitaban la reactivación de la economía y la generación de empleo que mantenía conforme a toda la sociedad chaqueña.
Con la llegada de Mauricio Macri y con el grifo cerrado por cuestiones puramente políticas, al gobernador Domingo Peppo se le hizo cuesta arriba mantener la gobernabilidad sin tener que agachar la cabeza y someterse a las presiones de la cúpula nacional del Pro. Si bien en 2016 la crisis no pegaba aún tan fuerte, durante este año la cosa cambió. La aprobación del Presupuesto 2017 en la Legislatura ya vino mal parida con idas y vueltas que derivaron en un retraso de más de cuatro meses para la sanción.
Luego de esto, se vino la primavera electoral con cuatro contiendas en el año que parecían tranquilizar al gobernador chaqueño pero que luego se convirtió en su peor pesadilla. En las generales para elegir diputados nacionales y luego de más de 10 años sin derrotas electorales, el Frente Chaco Merece Más perdió las elecciones de manera contundente en casi todos los circuitos de la provincia dejando también al descubierto una terrible y áspera disputa interna dentro del oficialismo que no tiene solución.
Peppo perdió hasta en su propia localidad, al igual que Coqui en Resistencia. Con esto comenzó la danza de reproches para definir quién era el responsable de la debacle electoral que luego se mezcló con la novela de fin de año por la aprobación de la Reforma Previsional. Debilitado por la derrota en las urnas, al mandatario chaqueña no le quedó otra más que arreglar con la Casa Rosada para sobrevivir financieramente y entregó el voto de sus legisladores para que Cambiemos pueda aprobar su vital paquete de leyes en el Congreso de la Nación.
Todavía no se puede dimensionar cuál será el costo político de cara al 2019, ni tampoco se podrá saber si el presidente cumplirá las promesas que le hizo al gobernador para obtener el apoyo legislativo. Lo que sí queda claro que Domingo Peppo apostó bien fuerte con el claro objetivo de acomodar las fichas e ir con todo por la reelección dentro de un año y medio. Capitanich agazapado también moverá sus fichas y seguramente dará combate encendiendo la llama interna existente en el justicialismo chaqueño y que ya nadie oculta.
