La disputa generada dentro del justicialismo chaqueño la semana pasada por la intervención de Villa Bermejito tuvo un nuevo capítulo en la Legislatura este miércoles. Lo que parecía un operativo para golpear al gobernador, terminó siendo una carta a favor, ya que el mandatario chaqueño ejerció buena presión y los diputados no tuvieron otra más que aceptar el veto parcial del Ejecutivo y comerse la designación de Rubén Guillón como flamante interventor tras la destitución de Lorenzo Heffner.

Si bien Jorge Capitanich ya no posee mucho poder en la Legislatura chaqueña, bastó con que Claudia Panzardi y Juan Manuel Pedrini pateen el tablero y le den punto de partida al a postura del gobernador. Tras un extenso debate en donde fueron protagonistas los chispazos y “pase de factura” desde los distintos bandos. La presidenta de la Cámara de Diputados, Ely Cuesta, volvió a defender la postura del Gustavismo y aseguró que el único objetivo era lograr tranquilidad en Villa Bermejito que se encontraba cerca de un estallido social sin precedentes. Obviamente, también aprovechó para meter el dedo en la llaga, ya que, sin dar nombres puntuales, fue contundente al manifestar que la reacción del Ejecutivo provincial fue lenta y tardía.