Familias de zona rural agradecieron al gobierno por recibir viviendas dignas
El pasado viernes tres familias del paraje Pampa Grande, jurisdicción de la localidad de Pampa del Infierno, iniciaron una nueva etapa en sus vidas luego de recibir los permisos de ocupación y llaves de sus flamantes hogares. En el marco de un sencillo acto que contó con la presencia del gobernador Domingo Peppo y del titular del Instituto Provincial de Desarrollo Urbano y Vivienda –Ipduv-, Hugo Acevedo, los habitantes de esta zona rural de la provincia sentaron nuevamente las bases de pertenencia al campo como lugar de trabajo y crecimiento.
En primer término recibió sus documentaciones Olga Gómez, nacida y criada en Pampa Grande, quien se mostró muy emocionada y agradecida por la calidad de la vivienda que le fuera otorgada por el gobierno provincial. “Estoy muy agradecida porque nunca me imaginé tener esta casa que tengo hoy, antes vivía en una casita de techo de tierra, en un ranchito, y siempre anhelé tener una casa de material como la que me entregó el gobernador”, dijo.
De igual manera, esta mujer que trabaja en la cría de ganado menor manifestó: “a través del intendente y de Peppo hoy con mi familia tenemos nuestra vivienda; tengo dos hijos, Gabriela y Leo, y para nosotros empieza una vida en una casa que nos gusta mucho”.
A su vez, Gabriel Vallejos, casado y padre cuatro hijos, señaló aferrado a su carpeta: “estoy muy contento por la casa que realmente es un regalo de dios, antes vivía en un rancho como mucha gente humilde y ahora estoy muy agradecido. Este es un cambio total en nuestra vida porque ahora tenemos una casa como tienen otras personas, y además esto nos da más fuerza para seguir en el campo donde crío chivos y chanchos”, agregó.
También expresó sus sensaciones Jesús Domínguez, quien destacó que “me siento muy contento porque hace muchísimo que vengo intentando hacer una casa y no me sale, no me alcanza el presupuesto, y esto me cayó de diez como se dice. Quiero agradecer al gobierno provincial que nos da esto, una casa que a la altura que estamos nos iba a poder hacer”, añadió.
Casado y padre de cuatro hijos Jesús valoró que la vivienda supone una importante mejora en la calidad de vida de su familia ya que “vivíamos en un rancho de tierra en el que a veces entraban arañas o bichos. Soy un pequeño productor, siembro sorgo y tengo algunos animales”, explicó finalmente este habitante de la zona rural de Pampa del Infierno.
