En el discurso ante la Legislatura Peppo redobló la apuesta
Durante el acto de apertura de sesiones ordinarias de la Cámara de Diputados, el gobernador Domingo Peppo brindó un escueto discurso en el que no sólo rindió cuentas de sus acciones de Gobierno, sino también preparó el terreno para hacer público ese gran secreto a voces que, es su aspiración de ir por la reelección durante el año electoral en curso.
Además de importantes presencias, también hubo notorias ausencias como la del intendente capitalino Jorge “Coqui” Capitanich, que se encuentra encabezando una dura lucha de poderes con el mandatario chaqueño en donde marcó la cancha y se anotó para la gobernación.
En discurso de manual del gobernador, que apenas llegó a los 58 minutos, realizó un repaso de las principales acciones llevadas a cabo durante su mandato, así como una descripción del excelente proceso de negociación con el Gobierno nacional lo que permitió la gobernabilidad en el Chaco durante los últimos tres años.
Esquivando con buena cintura temas calientes como los hechos de corrupción del año pasado, Peppo logró desviar la atención hacia el correcto ordenamiento financiero de la provincia, que a pesar del difícil escenario político-económico en el cual se encuentro inmerso el país, permitió sobrellevar mes a mes y poder estar en condiciones de aspirar a una reelección en los comicios que se avecinan.
Lógicamente, ésto estará sujeto al choque de planetas con Capitanich, quien pisa fuerte gracias a su excelente gestión como intendente de Resistencia, más los ocho años como gobernador de un Chaco que creció como nunca en su historia.
Se habla de una fuerte disputa interna en el oficialismo que se podría dirimir, o no, con unas cuestionadas Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). También se baraja la posibilidad de eliminar esta instancia y volver a las viejas elecciones internas, que sin dudas se constituirían en un duro escollo que debería sobrepasar el actual gobernador para ir en busca de la tan ansiada reelección.
Motivo por el cual, es que pudo escuchar un discurso tranquilo, sin mayores agresiones, con fines de consensos necesarios para encarar este año electoral, cuyo tablero de batalla será nada más y nada menos que el recinto legislativo. La lucha no solo será entre radicales y peronistas, ya que dentro de las filas del oficialismo se avizora un fuerte frente de tormenta hasta que queden definidas las candidaturas o, hasta que en una disputa interna se resuelva quién es el que manda.
Un dato no menor es que la caja de resonancia de la política chaqueña, volverá a dirimirse importantes y vitales iniciativas legislativas para el Ejecutivo, como leyes de endeudamiento necesarias para garantizar la gobernabilidad y afrontar la dura crisis que vive la Argentina que facilitaría el cumplimiento de las aspiraciones política de un Gobierno que, a los tumbos, llega con lo justo a sus cuatro primero años de gestión.
