Hace semanas que la politización del caso de la desaparición de Santiago Maldonado pasó a estar prácticamente en el orden del día de cada sesión chaqueña. Horas y horas de inservibles debates dilataron el tratamiento de importantes iniciativas, como por el ejemplo, la condonación de deudas a pequeños y medianos productores que tardó semanas en ser aprobada.

Ya es una costumbre que en las cuestiones previas a cada encuentro legislativo se desaten fervorosas discusiones que muchas veces están repletas de agravios, chicanas y pases de facturas entre las distintas bancadas. Sin ir más lejos, otro tema recurrente es el ataque proselitista del interbloque Frente Chaco Merece Más a la gestión nacional de Mauricio Macri, que inmediatamente genera la respuesta de Cambiemos.

Sin ir más lejos el pasado miércoles se generó una fuerte discusión entre Claudia Panzardi y un peso pesado como Carim Peche, que incluyó distintos tipos de descalificaciones que sonaron fuerte en el Recinto Deolindo Felipe Bittel. La legisladora justicialista habría pedido fuera de micrófono al jefe de la bancada radical que brindara explicaciones por los supuestos casos de narcotráfico en los que se encuentra relacionado. Esto generó un caos que luego de varios y tensos minutos fue enfriándose gracias a la muñeca de la titular de la Legislatura.

Esto continuará durante las próximas semanas y se irá sobrecalentando cuando se aproxime el domingo 22 de octubre. Pero la sociedad chaqueña tiene que estar tranquila, porque estas inservibles discusiones legislativas irán en franco crecimiento y aún más cuando el 10 de diciembre asuman en sus bancas increíbles personajes como Leandro Zdero, Juan Manuel Pedrini y hasta la nueva barbie justicialista Nadia García Amud, que con sus características sobresalientes para armar quilombos, aportarán pimienta al cotolengo ya existente en el Poder Legislativo.