El Intendente de Quitilipi, Sergio Carlos Casalboni, hasta el viernes 4 no había acreditado el correspondiente pago de dieta a los concejales en concepto de los meses de noviembre y diciembre, como así también el aguinaldo. El simple motivo habría sido que los concejales de la localidad determinaron readecuar las partidas presupuestarias del 2019.

Los concejales justicialistas trasladaron las partidas que estaban destinadas a contratos profesionales, hacia una readecuación al aspecto social, sin dejarse presionar por el todavía Intendente de la localidad y determinando un control aún más exhaustivo a las determinaciones que toma desde el ejecutivo municipal. Al parecer, esto no le habría caído bien a Casalboni, que determinó dejarlos sin parte de sus haberes y derechos adquiridos con el sólo hecho de ser trabajadores.