A media gestión de cumplir el mandato, Mauricio Macri va dejando un grupo importante de empresas (Bancos, mineras, agro exportadoras, telefónicas, energéticas y especuladores financieros) como principales favorecidos de un modelo capitalista, que ha acumulado ganancias millonarias en pocos administradores, favorecidos por el sistema económico neoliberal. Las consecuencias: Argentina al borde de la crisis social.

Entre las medidas implementadas por el Presidente Mauricio Macri en la economía a lo largo de su gestión, lo principal fue introducir un ajuste “ortodoxo”, pero con algunos toques “gradualistas”, el cual ha beneficiado a grandes empresarios y perjudicado a distintos sectores de la sociedad. Jubilados, personas con discapacidad y también están en este grupo sectores como la construcción, el comercio, las pymes, la industria y las economías regionales, con un gran retroceso en su producción. Y agregando a la clase pobre sin recursos, que hoy no tiene posibilidad de inclusión en la sociedad.

La recesión y la desocupación se hace notar, y golpea a gran parte de la sociedad Argentina. Que nota como sus ingresos como se devalúan diariamente alejando de los valores de la canasta de alimentación básica familiar. Volviendo al pasado, olvidado durante una década, se nota que un pequeño sector de grande empresarios son beneficiados con ganancias millonarias y regresamos a la diferencia social, del rico y el pobre, en este corto tiempo que llama la atención entre los que más tienen a los que están perdiendo todo porque quedan sin trabajo y el sistema no se reactiva. Sin posibilidades ante un futuro de exclusión social, laboral y educativa.

Sin embargo, esas riquezas no se invierten en empleos genuino, promesa de Cambiemos en las elecciones presidenciales que tenían la fórmula para sacar el país adelante. De esta forma, el modelo económico del Gobierno nacional no se detiene, dejando en el camino triunfadores y a un pueblo sin esperanzas, que conduce a los argentinos al mismo abismo del pasado.

Quita de retenciones y utilidades millonarias

Una de las primeras medidas que tomó Mauricio Macri ni bien asumió el poder, en diciembre de 2015, fue decretar la baja de las retenciones a la soja y la eliminación total de los derechos de exportación, así como también la supresión de las retenciones a la minería, generándoles amplias ganancias a ambos sectores.

Solo en esos primeros 18 meses de administración macrista, los grupos agroexportadores obtuvieron poco más de 97.000 millones de pesos de dividendos, pasando del 5,7 por ciento del valor agregado bruto en 2015, al 7,6 por ciento el año pasado, es decir, un aumento en la participación de 1,9 puntos porcentuales.

Por su parte, la actividad minera tuvo en este tiempo utilidades por más de 14.000 millones de dólares, la mayoría de ellos fugados o girados en forma inmediata al exterior sin producir nada ni generar empleo en el país. Hoy, ya comenzamos a pagar las consecuencias...