Saitó es argentino y como su padre, todo un ejemplo
Saitó padre, emigró del Japón hacia estas tierras luego de la segunda guerra mundial buscando paz y un nuevo y próspero destino. Se instaló en Resistencia y se dedicó al comercio, abrió una bulonería y destacaba por la paciencia y meticulosidad con la que atendía a sus clientes. Respetuoso al extremo tan prolijo que las cuentas las hacía a mano y con una regla trazaba una recta que unía al nombre del producto con su costo. Un fuera de serie para nuestras latitudes.
Ahora su hijo continúa el negocio de su padre y con válidas razones, está harto de que le digan “chino” despectivamente o por ignorancia o que le manden de regreso “a la China” por eso ha colocado el cartel que llamó la atención a un lector de NOVA y nos envió las fotografías.
El local comercial está ubicado en calle Salta 252, en pleno centro de la ciudad de Resistencia y aún así tiene la precaución de tener la puerta con candado para abrir luego de que el cliente haya ingresado.
La historia de Saitó padre da para escribir un libro y los vecinos que lo conocieron y han frecuentado lo extrañan y hablan de un “hombre honorable y extraño a nuestras características” por su extremo respeto a las personas, a la naturaleza y a la vida.
