El acto académico y el festival folclórico contaron la participación de alumnos del establecimiento y el acompañamiento de sus familiares en un concurrido encuentro que colmó las instalaciones con un verdadero clima festivo.

El joven Santiago Nicolás Werich asiste a “Huellas Argentinas desde los 7 años. “La escuela es mi segunda casa, acá paso mucho tiempo aprendiendo y compartiendo” dijo el flamante instructor de bombo y hoy con 14 años agradece a los profesores por la dedicación y a sus padres por el acompañamiento.

“La danza es mi vida, bailo desde hace muchos años y mi mayor deseo es vivir bailando, enseñar lo que aprendí” confiesa la adolescente Sofía Sol Cardozo minutos antes de subir al escenario junto a sus compañeros.

Por su parte, Karen Gianina De Jesús también cuenta que asiste a la escuela desde muy pequeña y a sus jovencísimos años dice con determinación: “Voy a seguir estudiando, quiero a ser profesora para compartir lo que aprendí”, mientras se arreglaba el peinado para el baile que la esperaba en el escenario.

La flamante profesora Mailen Agustina López quiebra su timidez y dice: “Bailar es expresarse, siempre me gustó bailar y en esta escuela aprendí mucho”, dice con emoción.

Los cuatro jóvenes egresados de la Escuela Municipal de Folclore “Huellas Argentinas” se suman a esa comunidad de bailarines que celebran la danza como expresión de la identidad nacional y que el establecimiento afianza con cada nuevo ciclo lectivo. La Escuela Municipal de Folclore, dependiente de la Municipalidad de Resistencia, en abril de 2015 cumplirá 50 años de labor educativa y artística.